Ha sido un buen
año. De poder dividir mi existencia en dos, debería decir que mis afectos se
han consolidado y vuelto a transformar en soporte vital de lo que soy.
Alejandra, a quien amo desde el alma, es el pilar, motivo y razón de todo. Mi hijos
Paula y Federico, seres a los que amo casi con devoción, siguen ocupando el
sitial que siempre tuvieron destinado en mí. Mis padres, hermana y sobrinos son
a quienes amo y forman parte de esa coraza de afectos imprescindibles en mi
vida.
He conocido personas
maravillosas. He aprendido a sentir otra forma de cariño. Esa que se expresa
solo con palabras escritas, sin miradas, sin abrazos, sin besos ni caricias,
pero con una dosis exacta de esa calidez que siempre logra
recorrer enormes distancias hasta atravesar el monitor y perforar el alma.
He escrito.
Bueno, regular o malo. Poco importa, en todo caso lo dejo a criterio de ustedes.
Pero en todo momento el corazón siempre fue volcado a los poemas. Y eso, en
verdad, es todo para mi. Solo busqué a cada momento que al leerme percibiesen la
honestidad y sinceridad con que lo hago y envío mis versos, luego de vencer
quizás mi absurdo pudor a esta altura del camino. Y ustedes tuvieron la enorme
bondad de recibirme y escuchar mi voz en su interior.
Por generosidad,
varios grupos en los que participo por el mismo amor a la poesía han destacado
algunos de mis trabajos. A ellos les agradezco haberme tenido en cuenta y
honrado con su reconocimiento. La fortuna estuvo de mi lado y me permitió
finalizar el año participando en tres Antologías: Antología “Versos desde el
corazón" de Diversidad Literaria (Madrid), Antología del “V Concurso
Internacional de Poesía Atiniense 2014” (Argentina) y “Selección de
cuentos y poesías” de Editorial Dunken (Argentina). A todos los involucrados en
las respectivas selecciones, mi profunda gratitud y agradecimiento. Me han
permitido dejar en el camino algunas semillas de mí, algo así como señales que han
sembrado en el alma la paz y felicidad de saber que en remotos tiempos, por
azar o simple casualidad, alguien sabrá que alguna vez existí.
Les deseo a
todos un buen fin de año y mejor año venidero. Con todo afecto. Marcelo.